Estas pensando en comprar tu primera casa y te haces un lío con los tipos de hipotecas que te ofrecen?
Pues amos a profundizar en las principales diferencias entre las 3 hipotecas que existen hoy en dia y cuál te puede resultar más interesante.
Empecemos por definir qué es el Euríbor (ya sé que estarás hart@ se escucharlo en la televisión pero prefiero dejar claro este concepto antes de continuar, es muuuuuyyy importante ) . Se trata de un índice que refleja el tipo de interés al que se prestan entre sí los bancos en el mercado de la zona euro. Es decir, es el tipo de interés que se aplica a las operaciones a corto plazo entre bancos en el mercado monetario de la zona euro.
El Euríbor es uno de los índices más utilizados en nuestro país para fijar el interés de las hipotecas a tipo variable.
Dicho esto, vamos a ver las principales diferencias entre los tres tipos de hipotecas, y cómo se ven afectadas por una subida o bajada del Euríbor:
Hipoteca variable: en este caso, el interés de la hipoteca se fija en función del Euríbor más un diferencial pactado con el banco. Eso significa que el interés de la hipoteca puede variar a lo largo del tiempo en función de la evolución del Euríbor. Si el Euríbor sube, el interés de la hipoteca también subirá, y viceversa. Las hipotecas variables suelen ser más atractivas en momentos en los que el Euríbor está bajo, ya que el interés de la hipoteca será menor. Sin embargo, si el Euríbor sube de manera significativa, el interés de la hipoteca también subirá, y eso puede hacer que la cuota mensual a pagar sea más elevada. Y esto qué quiere decir? Pues que en una situación de mercado donde el Euríbor está bajo, los bancos estarán menos interesados en ofrecer hipotecas a interés Variable (ya que a corto plazo les es menos rentable), por lo que la oferta de hipotecas a interés fijo será muy interesante. Y lo contrario ocurre cuando sube mucho el Euríbor, como nos estamos encontrando ahora mismo. Donde las hipotecas Fijas son el producto estrella de las entidades bancarias pero no tanto para los usuarios que las contratan, ya que los intereses se situan por encima del Euríbor.
Hipoteca mixta: en este caso, el interés de la hipoteca se fija a un tipo fijo durante un determinado plazo (por ejemplo, los primeros 10 años), y posteriormente pasa a ser variable, siguiendo la evolución del Euríbor más un diferencial pactado con el banco. Las hipotecas mixtas son una buena opción para aquellas personas que quieren tener una cierta estabilidad en el pago de la cuota durante un tiempo, pero que no quieren renunciar a la posibilidad de beneficiarse de un Euríbor bajo en el futuro.
- Hipoteca fija: en este caso, el interés de la hipoteca se fija durante todo el plazo de la hipoteca a un tipo que se pacta con el banco al principio. Eso significa que la cuota mensual a pagar no variará a lo largo del tiempo, independientemente de la evolución del Euríbor. Estas hipotecas son una buena opción para aquellas personas que quieren tener una mayor estabilidad y previsibilidad en el pago de la cuota mensual, ya que saben exactamente cuánto tendrán que pagar cada mes durante toda la vida de la hipoteca. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, si el Euríbor baja durante el plazo de la hipoteca, no te podrás beneficiar de esa bajada en el interés de la hipoteca.
Ahora bien, ¿qué sucedería en caso de una subida del Euríbor?
En el caso de las hipotecas variables, la subida del Euríbor se traduciría en un aumento del interés de la hipoteca y, por tanto, en un aumento de la cuota mensual a pagar.
En el caso de las hipotecas mixtas, sólo se vería afectada la parte variable de la hipoteca, por lo que la cuota mensual a pagar aumentaría a partir del momento en el que la hipoteca pasa a ser variable.
En el caso de las hipotecas fijas, no se vería afectada por una subida del Euríbor, ya que el interés está fijado durante todo el plazo de la hipoteca.
Es decir, cada tipo de hipoteca tiene sus ventajas y desventajas, y la elección de una u otra dependerá de las necesidades y preferencias de cada uno.
Pero como ya hemos comentado al principio de este artículo, es importante tener en cuenta la evolución del Euríbor y cómo puede afectar al interés de la hipoteca, así como comparar diferentes opciones y elegir la que mejor se ajuste a nuestras necesidades.
Además, no debes de olvidar que contrates la hipoteca que contrates siempre puedes cambiar de banco pasado un tiempo si te ofrecen una opción más interesante.
Espero haberte ayudado con este artículo, aunque si sigues teniendo alguna duda puedes dejármela en los comentarios de aquí abajo y intentaré responderte lo mejor que pueda 😉